Descripción
“No busco que sientan pena por mí. Estoy seguro de que si son supervivientes y están leyendo esto, también ustedes cargan con una historia trágica y deben haber dejado atrás a muchos seres queridos. Por el contrario, si son como Kathya, los hijos de una generación que estuvo a punto de desaparecer, entonces solo podrán aproximarse a la idea de lo que es la verdadera desolación.
Si son capaces de imaginar cómo era la vida antes de que todo comenzara, entonces tal vez puedan entender lo que significó el cambio profundo al que nos enfrentamos de un momento a otro. Mentiría si dijera que todos vivían felices y que no tenían preocupaciones, pero la mayoría de nosotros comíamos cuando teníamos hambre, teníamos medicamentos si los necesitábamos y podíamos acceder a la información que quisiéramos y cuando quisiéramos gracias a internet y a la gran variedad de libros que había”.
Luis Reyes (propietario verificado) –
El libro me ha gustado sobre todo por su crudeza en el tramo final. Su duración es perfecta para un viaje al trabajo o a algún destino y te apetezca leer algo rápido. El mundo creado y la situación descrita tiene potencial para más partes. Los personajes no se pueden desarrollar con plenitud por la duración pero dejan algunos matices interesantes que me encantarían que fueran desarrollados en otra entrega.
Angélica (propietario verificado) –
El libro me ha gustado mucho ,en especial por el giro al final inesperado. Es de muy ágil lectura, una novela corta o un cuento largo pero todo cierra.La lectura es muy ágil y atrapante.
En la Argentina pasa de todo pero espero que no pase estoooo.
Carla G.P –
Lucas se va yendo a la universidad cuando comienzan a caer extraños meteoritos en el cielo de Buenos Aires, se cree que todo se trata de una guerra del espacio y durante la huida se encuentran con otros sobrevivientes: Fernando, Marina, Lara y su hija Katya. Se mantienen a salvo debajo de un túnel hasta que llega PRISMA para rescatarlos.
Después de ello no se sabe mucho de lo que pasó con la “guerra” pero la trama continúa dentro de este nuevo escenario que introduce al lector a una pequeña distopía.
A pesar de que se desarrolla en tan solo diez capítulos y que el final impacta de sobremanera, todo se engloba en esos capítulos, es decir, está bien gestionado la historia en sí, no hay nada que falte o que se tenga que agregar; y de por sí, también, se ve una evolución de maduración en la prosa de la autora, ya que en obras anteriores no destacaba tanto la trama del libro y en este sí que terminó por gustarme mucho.